tag:blogger.com,1999:blog-89826012024-03-21T08:10:20.911-07:00Asi habló Siddharta (prologo)Un relato del buda historico, sintetizado de "La Nueva Revolucion Humana", "Buda el principe guerrero" de Kyra Palen y "Siddharta" de Herman Hesse. Esto en si no es una novela, sino mas bien una leve compilacion que me tome el atrevimiento de crear. En este blog se vera solo el prologo que es una breve introduccion a la historia principal. PROLOGO TERMINADO. La continuacion en la primera parte.Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.comBlogger11125tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1127543523563938622005-09-23T23:27:00.000-07:002015-05-01T21:43:55.700-07:00Indice del Prólogo.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibX6US3qKUb8PqLdinVhpjzZlmudblUAWrNHTONeciWRUo0Zk2G26JOJEkb1OLsAuPF130VAEiajj1AQkX0VAasa4h1UqWKQ-ze_nF1s-0vfO7JQmisRC3CmNQUiL9izlUEWRr/s1600/indice.jpg" imageanchor="1" style="clear: right; float: right; margin-bottom: 1em; margin-left: 1em;"><img alt="" border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEibX6US3qKUb8PqLdinVhpjzZlmudblUAWrNHTONeciWRUo0Zk2G26JOJEkb1OLsAuPF130VAEiajj1AQkX0VAasa4h1UqWKQ-ze_nF1s-0vfO7JQmisRC3CmNQUiL9izlUEWRr/s400/indice.jpg" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355447235442965314" style="display: block; height: 400px; margin-top: 0px; text-align: center; width: 246px;" /></a></div>
<span style="font-size: large;"><strong><span style="color: #33cc00;"><br /></span></strong>
<strong><span style="color: #33cc00;">PROLOGO</span></strong> </span><br />
<ul>
<li><span style="font-size: large;"><a href="http://asihablaba.blogspot.com/2004/11/1-genesis.html">1-Genesis.</a> </span></li>
<li><span style="font-size: large;"><a href="http://asihablaba.blogspot.com/2004/11/2-origen.html">2-Origen</a> </span></li>
<li><span style="font-size: large;"><a href="http://asihablaba.blogspot.com/2004/11/3-oraculos-y-presagios.html">3-Oraculos y Presagios.</a> </span></li>
<li><span style="font-size: large;"><a href="http://asihablaba.blogspot.com/2004/11/4-la-vida-y-la-muerte.html">4-La vida y la muerte.</a> </span></li>
<li><span style="font-size: large;"><a href="http://asihablaba.blogspot.com/2005/01/5-la-batalla.html">5-La batalla.</a> </span></li>
<li><span style="font-size: large;"><a href="http://asihablaba.blogspot.com/2005/01/6-el-desafio.html">6-El desafio.</a> </span></li>
<li><span style="font-size: large;"><a href="http://asihablaba.blogspot.com/2005/01/7-la-piedad.html">7-La piedad.</a> </span></li>
<li><span style="font-size: large;"><a href="http://asihablaba.blogspot.com/2005/01/8-poshika.html">8-Poshika.</a> </span></li>
<li><span style="font-size: large;"><a href="http://asihablaba.blogspot.com/2005/01/9-transitoriedad.html">9-Transitoriedad.</a> </span></li>
<li><div align="left">
<a href="http://asihablaba.blogspot.com/2005/01/10-preguntas-sin-respuesta.html"><span style="font-size: large;">10-Preguntas sin respuesta.</span></a></div>
</li>
</ul>
<div align="left">
<strong><span style="color: #33cc00; font-size: large;">PARTES SIGUIENTES</span></strong></div>
<ul>
<li><div align="left">
<a href="http://www.asihablaba1.blogspot.com/"><span style="font-size: large;">Asi habló Siddharta 1</span></a></div>
</li>
<li><a href="http://www.asihablo2.blogspot.com/"><span style="font-size: large;">Asi habló Siddharta 2</span></a></li>
</ul>
Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1106611969373471812005-01-24T16:10:00.000-08:002013-07-26T10:04:56.329-07:0010-Preguntas sin respuesta.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAgl_A6e7m_Tb-_3EOyXFfsnl_at539YFY3QM0iuArXkwOWO7oi44jUQhyXUFJGDTb_WtSn-ASSODQlUYDE9Kwcv2uXcy_dAiM9iOc2CS-slfoRq4GBEhDFwYR2zHCmsXJu_qQ/s1600-h/10-Preguntas.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><b><span style="font-size: large;"><img alt="" border="0" height="400" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355451583548761522" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiAgl_A6e7m_Tb-_3EOyXFfsnl_at539YFY3QM0iuArXkwOWO7oi44jUQhyXUFJGDTb_WtSn-ASSODQlUYDE9Kwcv2uXcy_dAiM9iOc2CS-slfoRq4GBEhDFwYR2zHCmsXJu_qQ/s400/10-Preguntas.jpg" width="356" /></span></b></a></div>
<b><span style="font-size: large;">Chandaka se sentía conmovido por las palabras de la anciana. Deseaba poder consolar a Siddharta, quien lo miraba apesadumbrado, sin saber que hacer. El deseo de su padre de mantenerlo aislado, apartado de los aspectos más horribles de la vida, había fracasado. Es más fácil digerir el dolor en pequeñas dosis, como el veneno. Uno acaba por acostumbrarse. Todos crecemos y todos los días sucede algo que indica la presencia de Maya: la enfermedad de un compañero de escuela, la muerte de un primo lejano... El mundo de los sentidos forma parte de nuestra vida cotidiana. Sin embargo, nos sorprendemos cuando presenciamos algo desagradable. El pobre Siddharta ignoraba que las personas envejecen. El rey había ordenado que todas las personas ancianas y enfermas fueran recluidas, para que su hijo no las viera. Hasta que Siddharta se había empeñado en visitar a su nodriza. Donde se ocultaría el rey al cabo de diez años?</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta se había quedado mudo, incapaz de articular palabra. Beso con ternura la mejilla de su niñera, le acaricio la mano y salió, tratando de reprimir las lágrimas, seguido de Chandaka.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Después de cerrar sigilosamente la puerta tras él, Siddharta se volvió hacia Chandaka y le pregunto:-Cómo es posible? No puedo imaginar... No alcanzo a comprenderlo. Por que?-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta había empezado a sentir el descontento en su interior. Comenzó por comprender que el amor de su padre y también el afecto de sus amigos Govinda, Ananda y Chandaka no lo harían feliz para toda la vida, no le brindarían la paz.</span></b>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1106610638185930602005-01-24T15:49:00.000-08:002013-07-26T10:06:20.368-07:009-Transitoriedad.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnR9x8KN-SBGI_N5qfMc_u080WSv4yAMUGNGYVJAs4v8wtP0Y1VX3_RGSAOGFNKvZstwEsB-PV_uY0_ITjOt-wQv2J2nNgTY57XgIeTDEBW4Cm7Dgmrbswb5V-CKB1EwmrX6o2/s1600-h/09-transitoriedad.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img alt="" border="0" height="640" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355451200362005090" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgnR9x8KN-SBGI_N5qfMc_u080WSv4yAMUGNGYVJAs4v8wtP0Y1VX3_RGSAOGFNKvZstwEsB-PV_uY0_ITjOt-wQv2J2nNgTY57XgIeTDEBW4Cm7Dgmrbswb5V-CKB1EwmrX6o2/s640/09-transitoriedad.jpg" width="321" /></a></div>
<b><span style="font-size: large;">Siddharta se arrodilló junto a ella y dijo:-Pobre Poshika, te has quemado... Te duele?-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Deseaba que me recordaras joven y hermosa. Lamento que me hayas visto en este deplorable estado. Soy vieja, Siddharta. El dolor forma parte de la vejez. Apenas veo, de modo que me alegro de no poder contemplar la expresión de tu rostro. Los jóvenes creéis que la vida es flexible y móvil, que podéis dominarla a vuestro antojo. Los viejos, en cambio, consideramos que la vida es un sujeto sumiso, una obra acabada, obsoleta, como yo misma. Me preguntas si me duele? Si, A veces me pregunto por que tengo que sufrir.-Poshika acaricio la mano de Siddharta con ternura.-Pero poseemos la asombrosa capacidad de adaptarnos a todo. A la perdida de la visión, a la inmovilidad... El amor a la vida, la chispa que todavía conservamos, hace que la compañía de un perro ya nos haga sentir felices y agradecidos...-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-No me ves, Poshika?-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-No, apenas distingo tus rasgos.-respondió la anciana.-Sin embargo, cada año veo algo distinto, nuevo. Este año veo el color de los árboles por medio de la temperatura de la brisa que sopla a mi alrededor. Antes gozábamos de la vida y de la naturaleza juntos. Compartíamos un gran amor hacia los animales. Los animales no son malos; no existe un solo animal perverso en todo el reino animal... En cambio, los hombres... Siempre fuiste un niño muy bueno, Siddharta.-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta se sentía tan abrumado que solo acertó a contestar:-No me explico por que no me dijeron nada... Quien te ha condenado a vivir aquí?-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Aunque veas una pequeña habitación, desprovista de vitalidad, para una vieja como yo resulta muy tranquila. Es lo que deseaba. No olvides que pertenezco a la casta de los brahmanes; puedo obtener todo lo que desee. Creo que muy pronto daré las gracias a Siva el destructor y a Yama por poner fin a mi vida. He sido virtuosa, de modo que Yama vendrá a buscarme sonriendo y agitando sus cuatro brazos, con su negra piel resplandeciente bajo el sol mientras atraviesa los aires montado en un pájaro. A veces, Siddharta, me pregunto por que tengo que soportar el mismo ciclo una y otra vez: nacer con dolor, amar, vivir y morir y vuelta a empezar... Cuando era joven...-la anciana se ruborizo al recordar el pasado.-De joven era muy bonita, y tuve el honor de hacerte de madre. Tú eras mi pequeño. Me sentía muy feliz. No debes compadecerme. Vivo aquí porque es mi deseo. No quise poner a prueba la paciencia de las personas que más quiero. Cuando empecé a perder la memoria, la gente...-la voz de la anciana se convirtió en un murmullo, mientras trataba de ver en su mente las imágenes que los jóvenes contemplaban en aquellos momentos.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Por fortuna,-Prosiguió.-a medida que envejecemos olvidamos las cosas. Te quiero mucho, Siddharta, y te agradezco que hayas venido a verme. Has hecho que mis sueños se cumplan. He llegado al final de mi vida y tú empiezas a vivir. Ya no existe lugar para mí en tu vida. Vete, te lo ruego...-</span></b>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1106608956329419402005-01-24T15:21:00.000-08:002013-07-26T10:06:55.401-07:008-Poshika.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhH3TumykcQfjajeyofq3WoPdywXx6zYsJMRu5Z9DMBC7gBWv1snFjYUzNsnWQ7v6hKPPeSy99QUHvWOasLN0SXhrf7-P32u-4zd5mhV-TMSVeqYLDdGEWIeWNZEfjnm2Ahn5wx/s1600-h/08-poshika.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-size: large;"><b><img alt="" border="0" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355450825311968706" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhH3TumykcQfjajeyofq3WoPdywXx6zYsJMRu5Z9DMBC7gBWv1snFjYUzNsnWQ7v6hKPPeSy99QUHvWOasLN0SXhrf7-P32u-4zd5mhV-TMSVeqYLDdGEWIeWNZEfjnm2Ahn5wx/s1600/08-poshika.jpg" /></b></span></a></div>
<span style="font-size: large;"><b>La aplastante seguridad de Chandaka en si mismo, instaba a los demás a obedecerlo, lo cual, combinado con su gracia y simpatía, hacia que las mujeres se enamoraran de el. Al haberse criado con Siddharta, cuya íntima visión de la verdad definía su carácter, Chandaka imaginaba que el mundo entero le pertenecía.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Como sabes-dijo a Ananda.-Siddharta fue a ver ayer a su tía, la reina, para desearle un feliz cumpleaños. Con la resaca que tenia, seguramente tendría un aspecto horrible. Hablaron de su vieja nodriza, Poshika, y se ha empeñado en ir a verla, pese a que todos están muy ocupados, pues el rey ha decidido partir mañana hacia Josala para reclamar su premio. Francamente, Ananda, me preocupa que Siddharta vaya a visitar a su vieja nodriza.-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Ananda advirtió que Chandaka se sentía turbado. Como si le disgustara hablar sobre los sentimientos de otra persona.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Sin embargo.-prosiguió Chandaka.-tengo la curiosa sensación de que debería acompañarlo a verla. Desde la batalla, siempre esta de mal humor. Hace más de quince años que no ha visto a su nodriza. Siddharta no ha experimentado nunca una emoción intensa, y sabiendo lo sensible que es...-Chandaka se detuvo unos instantes y luego continuo-:Desde la batalla, ha permanecido enfrascado en si mismo. Poshika debe tener cien años... En algunos aspectos, Siddharta es imprevisible, y no se como reaccionara al verla. Deberíamos prepararlo de a poco.-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Ananda comprendió que su amigo había acudido a el para pedirle ayuda. Chandaka se paseaba arriba y abajo como un potrillo nervioso. Al cabo de unos minutos, continuó:-Aunque supongo que al final Siddharta tendrá que conocer el lado oscuro de la vida. Le gusta el riesgo, la pasión, llorar, reír... Todo eso le hace feliz.-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Siddharta esta a punto de llegar.-respondió Ananda.-Ya sabes lo testarudo que es. Cuando se le mete una idea en la cabeza, no hay quien logre hacerle cambiar de parecer. No tendrá más remedio que llevarlo. Si me necesitas, aquí estaré.-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>En aquel momento entro Siddharta, sonriendo, seguro de si mismo, Llevaba su túnica favorita y un magnifico collar de oro y piedras preciosas.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Ah, veo que me estabais esperando!-dijo alegremente.-Vamos a las habitaciones de las mujeres... Aunque sé que Ananda dirá que no puede acompañarme porque tiene que hacer el equipaje.-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Siddharta y Chandaka sonrieron ante la incapacidad de Ananda de emprender el menor viaje sin llevarse todas sus cosas. Una costumbre de la que Chandaka y Siddharta solían aprovecharse de niños.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Chandaka y Siddharta salieron de la habitación de Ananda y se dirigieron a los aposentos de las mujeres, donde las que ya no satisfacían al rey por haber envejecido Vivian cómodamente, esperando la muerte. Los pasillos estaban débilmente iluminados. A ambos lados de los corredores se alzaban unas macizas puertas de madera que impedían el acceso a las habitaciones. El aire, impregnado de un olor acre, era casi irrespirable.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Cuando Siddharta se disponía a entrar en una de las habitaciones, Chandaka, temiendo que el rey los castigara por haber penetrado en los aposentos de las mujeres, trato de disuadir a su amigo.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Espera, no puedo dejar que entres.-murmuro.-Tengo el deber de advertirte que tu presencia aquí contraviene todos los edictos y costumbres de la corte. El rey se enfadara con nosotros. Es mejor que...-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Haciendo caso omiso0 de la suplica de su amigo, Siddharta abrió la puerta.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Unas pocas velas iluminaban la pequeña y pulcra habitación, en la que había una amplia ventana que daba a un patio. En un rincón había un pequeño lecho en el que yacía Poshika, la vieja nodriza de Siddharta, cubierta con una manta de seda.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Al darse cuenta de la presencia de los dos jóvenes, la anciana se levanto, no sin grandes esfuerzos, pues estaba muy delicada de salud. No obstante, era evidente que en su juventud había sido una gran belleza. Al reconocer al príncipe, se le iluminaron los ojos. Después de haberlo servido durante tantos años, la vieja nodriza se sentía turbada por su presencia.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Poshika se inclino torpemente ante Siddharta y dijo:-Oh, mi príncipe aquí! Me siento honrada por tu visita. Que puedo ofrecerte? Te apetece una infusión de hierbas? O un poco de caldo...?</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Chandaka cerró los ojos para no presenciar aquella escena tan patética. Siddharta permanecía mudo, apenado por el frágil y delicado aspecto que presentaba su querida nodriza.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Siddharta recordó el cálido perfume de Poshika. Había sido muy hermosa. Solía llevar su larga melena negra peinada en una trenza alrededor de la cabeza, como una corona. Un día la sorprendió peinándose, con el cabello extendido sobre el suelo de mármol blanco, formando unas ondas negras como un dragón marítimo. A partir de aquel día la había considerado la diosa del mar.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Poshika tomo un frasco de cerámica con mano temblorosa y trato de verter en una taza la infusión de hierbas que había preparado. Pero sus esfuerzos fueron en vano, pues derramo unas gotas del líquido hirviendo sobre su mano y dejo caer el frasco al suelo. Al oír el ruido, los dos jóvenes se sobresaltaron. Avergonzada, Poshika se sentó en la cama y rompió a llorar desconsoladamente.</b></span>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1106514413703373592005-01-23T13:48:00.000-08:002013-07-26T10:07:25.612-07:007-La piedad.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjdYMLEsoH4G-6OXWs4u6dx6UnUUDTjrqRBK8aMuwuOeqbpHh7s86VhMkbA3WyTTq83VVI80hUzSH4Wm-Z8sXfT481YXz8yrZLoM2r4QbYA0ZHLP3NVXgCcH3mOskW5tBvILW3J/s1600-h/07-lapiedad.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><b><span style="font-size: large;"><img alt="" border="0" height="640" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355450548019606386" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjdYMLEsoH4G-6OXWs4u6dx6UnUUDTjrqRBK8aMuwuOeqbpHh7s86VhMkbA3WyTTq83VVI80hUzSH4Wm-Z8sXfT481YXz8yrZLoM2r4QbYA0ZHLP3NVXgCcH3mOskW5tBvILW3J/s640/07-lapiedad.jpg" width="258" /></span></b></a></div>
<b><span style="font-size: large;">Virudaja suponía que Siddharta daría media vuelta y echaría a correr. Pero el príncipe de los sakyas se abalanzo sobre él y le arrebato la espada.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Adelante, cobarde!-grito Virudaja.-Mátame si te atreves!-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Virudaja había caído al suelo y Siddharta tenia la espada en su cuello. Pero no le asesto el golpe de muerte. Virudaja se sentía abandonado, humillado ante sus soldados. Ni siquiera su padre se había adelantado para defenderlo.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta se volvió hacia Prasenajit. El rey de los josalas asintió y acto seguido ordenó a sus soldados que depusieran las armas. La lucha había terminado.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta envaino de nuevo la espada.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Virudaja se levanto, temblando de ira.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Un verdadero príncipe me hubiera matado.-bufo mirando con odio a su enemigo.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta se encogió de hombros y se alejo.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Virudaja sonrió perversamente. Entonces era cierto. Siddharta no había respondido a su desafío. El débil príncipe de los sakyas se había negado a matarlo. La sangre lo atemorizaba. Un Castrilla! Que vergüenza!</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Virudaja no tenía la visión para conocer algo mas abarcativo que el momento presente, ni conocía lo que Siddharta había ejercido en él, piedad. El príncipe sakya tenía una peculiar visión que lo llevaría más lejos que todo el odio de Virudaja podía llevarlo. Así empezaba una relación de odio y venganza.</span></b>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1106515761836482382005-01-23T13:17:00.000-08:002013-07-26T10:08:07.454-07:006-El desafio.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgiRSvQ4tjmXpAQYcR_Y7SCvt0Or265mWiQm3inu2DiDKBdHuTaFuTCqjuSPGtWFDHsL_O92TDunwfJ1JaqzSfAe2FQLdOYEkafpfRCnGhSVK_polNe-byPbFZobsTDeUllrgFA/s1600-h/06-eldesafio.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><b><span style="font-size: large;"><img alt="" border="0" height="640" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355450103039766434" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgiRSvQ4tjmXpAQYcR_Y7SCvt0Or265mWiQm3inu2DiDKBdHuTaFuTCqjuSPGtWFDHsL_O92TDunwfJ1JaqzSfAe2FQLdOYEkafpfRCnGhSVK_polNe-byPbFZobsTDeUllrgFA/s640/06-eldesafio.jpg" width="443" /></span></b></a></div>
<b><span style="font-size: large;">-A los caballos-exclamó Ananda, arrastrando al aturdido Siddharta.-¿Puedes montar?-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta asintió. Los dos jóvenes estaban empapados en sudor. Se montaron en sus caballos y regresaron junto a sus compañeros. Ananda tenia los brazos y las piernas ensangrentados, lo mismo que Siddharta.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">El puente se había derrumbado por completo. Al otro lado quedaba el resto del destacamento de los josalas, que todavía superaban en número a los sakyas. Las tropas sakyas empezaron a avanzar hacia la meseta, donde el rey Prasenajit de josala reorganizaba a sus tropas para la lucha cuerpo a cuerpo.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta ordeno a su destacamento de arqueros que dispararan contra las fuerzas josalas mientras seguían avanzando.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Al ver un saliente en la roca cubierto de nieve, Siddharta llamo al jefe de los arqueros, un hombre alto como una torre. El soldado, cumpliendo las órdenes de su príncipe, disparo una flecha contra la masa de nieve.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Al oír el estruendo del alud, Ananda alzo la vista aterrado.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Los josalas echaron a correr despavoridos, tropezando y chocando sin orden ni concierto. Temían morir sepultados por el alud de nieve. Siddharta oyó a Prasenajit gritar a su hijo:-Basta de estrategias! Debemos atacarlos con las armas que nos queden.-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta y Suddhodana observaron a los josalas mientras estos atacaban a sus soldados.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Que podemos hacer?-pregunto Suddhodana a Siddharta.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Ordena a los soldados que emprendan la retirada.-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Estas loco?-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Es nuestra única oportunidad de escapar con vida.-respondió Siddharta.-Debemos atravesar el río.-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">El rey ordeno a sus soldados que retrocedieran. Los soldados obedecieron al rey, sin dejar que la muerte de sus camaradas los afectara. De repente, el rey se detuvo y exclamo:-Deteneos! Colocaos en fila a la orilla del río. Los josalas montaran los peces en lugar de los elefantes.-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Los soldados josalas, capitaneados por el príncipe Virudaja, galopaban tras los sakyas. Pero cuando estos se detuvieron súbitamente y se colocaron en fila a la orilla del río, los sorprendidos josalas se vieron obligados a meterse en el agua.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">El príncipe Virudaja no tuvo más remedio que ordenar a sus ejércitos que se lanzaran a la corriente.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Se detuvo en la orilla opuesta del río y grito con arrogancia:-Quien es el que se hace llamar Siddharta?-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Preocupados por si algo malo le sucedía a su príncipe, los soldados enmudecieron mientras Siddharta avanzaba hacia el enemigo.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Desafío a Siddharta a luchar conmigo, si es que se atreve! Si se niega, deberá postrarse ante mi.-grito Virudaja.</span></b>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1106513228657549402005-01-23T13:16:00.000-08:002013-07-26T10:08:29.988-07:005-La batalla.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgu5EKmt_ja1TWI6pYySPvytNEB1SRR4kIqKOw2SfKKMadm3kzGG2Ih5hyphenhyphenAh6xSdSe4VMF05_bguuhKSofxEZbvZDMgEHQdD3l4CofrwKZAMqdSrHcTAwOB-ZLJNnF7FQ2YbdwU/s1600-h/05-labatalla.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><span style="font-size: large;"><b><img alt="" border="0" height="640" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355449624889660450" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgu5EKmt_ja1TWI6pYySPvytNEB1SRR4kIqKOw2SfKKMadm3kzGG2Ih5hyphenhyphenAh6xSdSe4VMF05_bguuhKSofxEZbvZDMgEHQdD3l4CofrwKZAMqdSrHcTAwOB-ZLJNnF7FQ2YbdwU/s640/05-labatalla.jpg" width="424" /></b></span></a></div>
<span style="font-size: large;"><b>El pequeño pero valiente ejercito de Sakya penetro en el claro, compuesto por soldados a caballo, carrozas ocupadas por arqueros, carruajes de madera conducidos por la infantería y, cerrando la comitiva, los elefantes que bramaban y agitaban la trompa.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>De pronto, miles de flechas lanzadas por los josalas oscurecieron el cielo. Las defensas de los sakyas, de metal reforzado, eran muy eficaces, pero no consiguieron detener las flechas.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Te dije que debíamos envenenar las flechas.-dijo Virudaja a su padre.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Eso es una traición y una bajeza.-respondió Prasenajit.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Virudaja vio que Siddharta había caído herido. El joven se levanto; mirando fijamente al príncipe de los josalas, se extrajo la flecha del brazo y examino la herida. Luego, sin apartar la vista de Virudaja, Siddharta se succiono la herida y escupió el veneno. Al cabo de unos instantes, Siddharta regreso junto a su ejército. Virudaja sonrió, Como iba a ganar? El ejército de los josalas era mucho más numeroso que las tropas sakyas.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Siddharta se acerco a su primo Ananda y le pregunto:-Estas dispuesto?-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Ananda asintió, nervioso. No se explicaba como lograba su primo conservar la calma.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Es nuestra primera batalla.-comento Ananda, sonriendo.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Siddharta se echo a reír.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-No te preocupes, Siddharta.-dijo Ananda.-Me gustan los desafíos.-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Los dos ejércitos se pusieron en marcha. El contingente de los josalas se detuvo al borde de la meseta, un lugar estratégico desde donde podían observar todos los movimientos del enemigo. Los josalas habían conducido a los elefantes hasta el borde del barranco, y los utilizaban para colocar una hilera de troncos debajo de una plataforma a fin de construir un puente.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Ananda se estremeció y se volvió hacia su primo, pero Siddharta contemplaba el rostro burlón del príncipe Virudaja.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Tratan de rodearnos.-señalo Siddharta a su padre, sin perder la calma.-Debemos atacar la meseta.-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Suddhodana dudo unos instantes antes de responder.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Son demasiados, no podemos hacer nada.-dijo con tristeza.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Yo me ocupare del puente.-dijo Siddharta.-Acompáñame, Ananda.-</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Y tras esas palabras echo a galopar hacia el barranco.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Ananda lo siguió. Los dos jóvenes saltaron de sus caballos y comenzaron a trepar por el barranco hacia el puente de madera. El puente oscilaba y crujía por el peso de los elefantes y las carrozas. Docenas de hombres armados custodiaban el frágil puente. Mas abajo, Ananda y Siddharta escalaban el barranco sin que los guardias repararan en ellos.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Ananda tenía miedo. Odiaba las alturas...pero en aquel momento Siddharta se volvió y le hizo un guiño, y Ananda se sintió mas animado.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Las fuerzas sakyas atacaron la meseta, pero los josalas, confiando en poder escapar a través del puente, apenas ofrecieron resistencia. Los arqueros sakyas dispararon sus flechas contra la meseta, buena parte de la cual estaba neutralizada por las defensas metálicas.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Siddharta fue el primero que alcanzo el puente. Sin que los josalas lo vieran, empezó a partir con su espada las gruesas cuerdas que sujetaban las tablas, La plataforma comenzó a balancearse peligrosamente bajo el peso de los elefantes. Al cabo de un rato, Siddharta y Ananda lograron cortar las cuerdas de algunas tablas, que cayeron al fondo del barranco.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>-Nos han visto.-dijo Ananda, señalando a Virudaja.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Virudaja echo a correr, gritando a sus arqueros. Las flechas comenzaron a volar por los aires. Ananda asesto un último golpe con su espada y el puente empezó a derrumbarse. Todos los hombres, los elefantes y los caballos se precipitaron al fondo del barranco, entre gritos de dolor y pánico, y allí murieron aplastados contra las piedras. Siddharta palideció. Estaba a punto de desvanecerse de la impresión.</b></span><br />
<span style="font-size: large;"><b>Ananda no sabia que hacer. Tenia que llevarse a Siddharta de allí. Pero como? Al fin, cogió una cuerda y sujetó un cabo alrededor de Siddharta y de si mismo, y el otro a una roca. Luego, mientras las flechas seguían lloviendo sobre ellos, sostuvo a Siddharta y salto. La cuerda se tensó a un metro del fondo del barranco.</b></span>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1099436488458108952004-11-02T15:00:00.000-08:002013-07-26T10:02:50.995-07:004-La vida y la muerte.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeQf5iWvVFUTho4dvarcOi_wYjVqEce8uKZPcHltX9e6zg8MAasIBnVdPa6PAsPCUQ7WITmL3iQxWGybxHNM710pYvzdpKv-aixxz7s937GKbMKvroSjaZW_obPIX8yvmZvONs/s1600-h/04-lavidaylamuerte.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><b><span style="font-size: large;"><img alt="" border="0" height="640" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355449193137007954" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgeQf5iWvVFUTho4dvarcOi_wYjVqEce8uKZPcHltX9e6zg8MAasIBnVdPa6PAsPCUQ7WITmL3iQxWGybxHNM710pYvzdpKv-aixxz7s937GKbMKvroSjaZW_obPIX8yvmZvONs/s640/04-lavidaylamuerte.jpg" width="424" /></span></b></a></div>
<b><span style="font-size: large;">De niño, Siddharta solía cuestionar las creencias de los brahmanes y a veces discutía con Asvapati. El sacerdote recordaba un día de primavera en que hallaron un ciervo herido; Siddharta había llorado al extraer la flecha del costado del animal. Asvapati hablo al principio sobre la muerte y el papel que desempeñaba en el mundo material. Siddharta pertenecía a una casta de guerreros, privilegio que había adquirido cumpliendo con su deber en anteriores encarnaciones, y solo alcanzaría la grandeza en futura reencarnaciones si cumplía con su deber en la presente encarnación. Un guerrero lucha, y debe matar. Siddharta contesto que prefería morir y reencarnarse en un esclavo antes que matar a un ser vivo. El brahmán le recordó lo que eso significaría para su padre. Siddharta miro a Asvapati con unos ojos llenos de tristeza mientras el brahmán le explicaba que el cuerpo no constituye la vida, que Siddharta no vive en las costillas, ni en los brazos, ni en los pies, sino en todas partes... y en ninguna. El cuerpo solo es una fantasía que sirve para que lo vean a uno, al igual que el aliento se hiela cuando hace frío para resultar visible. El autentico Siddharta es inmortal, y es la misma persona que el brahmán. El chico sonrió y se encogió de hombros.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Nada justifica el hecho de matar.-respondió.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Pasaron varias décadas. El tiempo había erosionado la roca de la cordillera del Himalaya, la nieve derretida se deslizaba por las abruptas laderas, reluciendo como ópalos. El campo de batalla entre Sakyas y Josalas se preparaba. Siddharta había cumplido veinticinco años y era un joven apuesto, fuerte, viril. Estaba, como era su deber, junto a su padre. Pero cuando el rey miró a su hijo, le asalto la duda de si Siddharta se hallaba junto al por convicción o para complacerlo. Aquellos ojos, de un azul intenso, parecían siempre vagar perdidos por el infinito.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Presta atención, Siddharta.-advirtió el rey.-Ves esa primera carroza? La que conduce aquel individuo gordo, cargado de joyas?-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Siddharta asintió. Era alto, fuerte, hermoso, y tenia el aspecto de un autentico guerrero. Llevaba un arco rojo y una espada, como todos los demás. Sin embargo, estaba rodeado por una extraña fuerza, serena y poderosa como el río Ganges, pero dotada de una fuerza vertical semejante al Himalaya, como un brazo que se alzaba al cielo.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Ese es su rey.-explico Suddhodana.-El rey Prasenajit de Josala. Es controlable. Sabe gobernar, pero le gusta la buena mesa. A quien debes temer es a su hijo, el príncipe Virudaja.-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">El príncipe Virudaja se echo a reír, sin hacer caso de la furibunda mirada que le dirigió el jefe de los brahmanes. Virudaja quería desafiar al joven y débil príncipe de Sakya. Según decían, a Siddharta no le gustaba cazar; que clase de hombre menospreciaba la caza? Tomare Sakya y será mía, pensó Virudaja. Seré el rey de Josala y Sakya. Siempre me ha gustado el sonido de esos dos nombres juntos.</span></b>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1099434888305437112004-11-02T14:15:00.000-08:002013-07-26T10:02:06.563-07:003-Oraculos y Presagios.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhXU3XSnxi9QflcLm4mOAln6Z76DEHDSsCb3_PCRlx-Jz7UefhYVH-P2_IbDRIqt3cFCmNqlX4ru2VM7aBf8LxQiFX42FiOtPdBKqzEZUTzeseQFTqDA9aijzEv5tfcx9d_Za_d/s1600-h/03.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><b><span style="font-size: large;"><img alt="" border="0" height="640" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355448658308096738" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhXU3XSnxi9QflcLm4mOAln6Z76DEHDSsCb3_PCRlx-Jz7UefhYVH-P2_IbDRIqt3cFCmNqlX4ru2VM7aBf8LxQiFX42FiOtPdBKqzEZUTzeseQFTqDA9aijzEv5tfcx9d_Za_d/s640/03.jpg" width="480" /></span></b></a></div>
<b><span style="font-size: large;">Ante el asombro de todos, los ojos del sabio se humedecieron y unas gruesas lágrimas empezaron a descender por sus mejillas.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Que sucede, Ashita?-le pregunto preocupado Asvapati.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Ashita se dirigió al rey y dijo:-El destino de tu hijo es convertirse en el iluminado, en Buda, el que hallara la solución al dolor y al sufrimiento de la humanidad. Lloro porque no viviré para contemplar ese momento. Esta escrito que en la mañana de la luna llena del mes de Vesaja, en el año de Bakta, había de nacer un niño. Y ese niño seria perfecto en todos los aspectos, física y espiritualmente...-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Atónito, el rey trato de controlar sus emociones Que significaban las palabras del sabio? Que su hijo habría de convertirse en un monje? No, mi hijo ha nacido para gobernar, para ser mi heredero... Quizás fuera una maniobra de los brahmanes para conquistar el poder, pero no se atreverían a tanto... No! El oráculo querrá decir otra cosa que no alcanzo a comprender. No permitiré que nada aleje a mi hijo de sus obligaciones como rey. Jamás!</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Que destino predices para mi hijo, Oráculo?-pregunto el rey, tratando de contener su ira.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-No puedo responderte, señor.-contesto el oráculo.-Si tu hijo elige el camino de la iluminación, los dioses se alegraran y Brama se inclinara ante él. Pero deberá renunciar a cuanto posee y dejar a su padre, su familia, su reino...-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Basta!-exclamo el rey Suddhodana, mirando a Asvapati con aire acusador, como si le reprochara sus nefastas creencias. Y añadió señalando el palacio.-Quien iba a renunciar a todo eso? El hijo de Maya ha nacido para ser rey, para gobernar, para conquistar, para casarse y tener muchos hijos...-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Asvapati trato de tranquilizar al rey.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-No debes oponerte a Brama, tu sagrado deber...-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Mi deber?-estallo Suddhodana. No pronuncies esa palabra! Soy el rey! Como monarca, puedo exigir lo que me plazca. Ni Brama ni los dioses pueden negarme el derecho a tener una familia. Mi hijo me pertenece!-</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Ashita miro al rey con tristeza. Luego le entrego a su hijo, que había permanecido muy tranquilo todo el rato, observando a su padre y al oráculo como si comprendiera lo que decían.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">El oráculo había hablado y era hora de regresar al palacio. Pero antes, el rey Suddhodana miro de nuevo a Ashita, descendiente de hombres santos, y observo el poder que emanaba de toda su persona.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Y si el oráculo tiene razón? Pensó el rey. Eso significaría el fin de mi reinado. Que es esta extraña sensación que se ha apoderado de mí? Acaso debería sentirme satisfecho? No, lo que siento es temor. A continuación, el rey dio media vuelta y se encamino hacia el poblado.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Según las escrituras budistas y otros textos antiguos, en aquellos días, la india estaba dividida en “dieciséis grandes reinos”, de los cuales los más prominentes eran Magadha y Kosala. Todos se disputaban la supremacía. El pequeño estado tribal de los Shakyas no se hallaba entre los dieciséis, pero sus habitantes eran orgullosos, y se llamaban a sí mismos “descendientes del sol”.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Aunque el reino de su padre era pequeño, el príncipe Siddharta creció rodeado de lujo y fue educado en las artes civiles y militares. Disponía de un palacio para cada estación del año y de sirvientes con parasoles que acudían presurosos para protegerlo de los quemantes rayos del sol. Durante el periodo de las lluvias, jóvenes doncellas, bailarinas y músicos lo servían y entretenían para que no tuviera que aventurarse extramuros. Vivía con total comodidad y holgura.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">Y si Siddharta un día se convertía en dios, si un día entraba en el imperio de la luz, Govinda lo seguiría entonces como su amigo, su acompañante, su criado, su escudero, su sombra. Así querían todos a Siddharta. A todos daba alegría y gozo.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">No obstante, el propio Siddharta no sentía ni alegría ni gozo. Su corazón no compartía ese júbilo general cuando andaba por los caminos rosados del jardín de higueras o cuando se hallaba sentado a la sombra azul del bosque de la contemplación, cuando lavaba sus miembros en el diario baño propiciatorio, o hacia sacrificios entre las profundas sombras del bosque de mangos. Hasta él llegaban sin cesar sueños y pensamientos que emanaban de la corriente del río, del brillo de las estrellas, del resplandor del sol. El ánimo se le intranquilizaba con pesadillas salidas del humo de los sacrificios de los versos del Rig Veda, filtrados en las doctrinas de los viejos brahmanes.</span></b>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1099433393037844702004-11-02T13:43:00.000-08:002013-07-26T10:03:29.519-07:002-Origen<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6L8-Bx83hNoB4IgsMkdZRJG1qUnIEKKkmACLvAmk4q5ydyJQpCfUGzOu41qe0dPlYSg5kU5u2tzl8wyneq4hUGEZfWH77BZE8YUGnhUwjrfS4kG8EcKN1x0ByIGXwAAtg92rw/s1600-h/02.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><b><span style="font-size: large;"><img alt="" border="0" height="400" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355448225638202738" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh6L8-Bx83hNoB4IgsMkdZRJG1qUnIEKKkmACLvAmk4q5ydyJQpCfUGzOu41qe0dPlYSg5kU5u2tzl8wyneq4hUGEZfWH77BZE8YUGnhUwjrfS4kG8EcKN1x0ByIGXwAAtg92rw/s400/02.jpg" width="183" /></span></b></a></div>
<b><span style="font-size: large;">Siddharta era hijo del rey Suddhodana y de la reina Maya, soberanos de los Shakyas. Una mañana, el rey mandó llamar al cocinero y le ordeno: “prepara comida para tres”. El cocinero lo miró extrañado, pues solo se hallaban presentes el rey y la reina Maya. Al observar el estupor del cocinero, Suddhodana se echo a reír y le explico que la reina había soñado que se aparecía un elefante blanco y que este le había dado un hijo. Como se sabe, un elefante es símbolo de buena fortuna. La historia del elefante blanco se difundió rápidamente por el palacio. El cocinero tenía una gran imaginación, y quizás el rey no le dijo que se trataba de un elefante blanco sino de una cabra del monte. Habría nacido en los jardines de Lumbini. Situados en lo que actualmente el pueblo de Paderia, al sur de Nepal, cerca de la frontera india, cuando su madre se dirigía de Kapilavastu a la casa de sus padres. En febrero de 1986, se desenterró allí, en un templo, una columna de piedra del rey Ashoka. La inscripción decía que el rey había visitado los jardines y el pilar para conmemorar el nacimiento del buda en ese lugar. El descubrimiento probó que Siddharta era un personaje real, no una leyenda. Se cree Maya falleció una semana después del nacimiento. Por esa razón, el niño fue criado por su tía materna, Mahaprajapati. Fue el comienzo tumultuoso de una vida turbulenta. Al tiempo, llego Ashita, el oráculo. La sensación de que se avecinaba un suceso extraordinario se apodero de todos los presentes. El rey jamás había visto un día tan claro y despejado. Un excelente presagio. Se hallaban en un pequeño y aromático claro situado entre el bosque y las montañas. El Himalaya se recortaba contra el cielo, iluminado por el sol. El denso bosque de bambú se extendía hacia el norte, y de vez en cuando se oía el rugido de los leones y otras fieras. Siddharta, el hermoso niño recién nacido, envuelto en una resplandeciente tela dorada, había sido transportado hasta el claro por Mahaprajapati, su tía. Mahaprajapati, hermana de Maya, estaba en la plenitud de la vida y la belleza. Sus negros ojos permanecían fijos en el monarca, como si intentara adivinar sus pensamientos y emociones. El bebe que yacía en el asiento del trono de piedra, en una esquina del anfiteatro, gorjeaba y reía alegremente, como si le satisfaciera ser el centro de atención. El imponente trono estaba colocado bajo el yambo más grande del bosque. Cuando el árbol estaba en flor, derramaba sus pétalos sobre el inmutable trono de piedra, mientras los árboles y la hierba se extendían a su alrededor. La huesuda mano de Ashita, el tibetano, estaba apoyada sobre las dos cobras, el viejo símbolo del Mugsanga, el sello del valle del Indo. Marido y mujer, los reptiles constituían los símbolos de la ayuda que la madre tierra había prestado a Parshva, y se extendían en diagonal sobre su pecho. Ashita se dirigió al niño, lo cogió en brazos y lo sostuvo en alto. Siddharta estaba envuelto en un resplandor dorado y clavo sus azules y vivarachos ojos en el oráculo. Ashita le examino detenidamente piernas y brazos, los dedos, la textura de la piel...</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Es perfecto.-sonrió satisfecho.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">El rey miró a su hijo con ternura. Mi hijo!, pensó. Es un niño sano, lleno de vitalidad. Sin duda me sucederá con honor. Me enorgullezco de ti. Seguirás mis pasos y probablemente serás más grande que yo. Sin embargo, jamás se le había ocurrido la posibilidad de que su hijo lo eclipsara. Suddhodana sintió una punzada de tristeza al pensar en Maya, su amor, su reina. Si aun siguiera con vida se sentiría orgullosa del pequeño, tan hermoso, tan desvalido, que había cautivado a todo el pueblo... Por que había tenido que morir al dar a luz? Era tan joven... Por que? Solo cabía una respuesta: el karma.. El rey bajo la cabeza para ocultar su dolor... Ashita también se puso serio.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">-Alégrate de que haya nacido.-dijo a Suddhodana.-Esta destinado a convertirse en el rey de reyes.</span></b><br />
<b><span style="font-size: large;">El rey sonrió complacido y su tristeza se desvaneció. Lo sabia! Se había puesto las galas reales para celebrar tan dichosa ocasión. Llevaba un dhoti rojo y en las manos lucia varios anillos de oro y rubíes. Sobre el pecho desnudo llevaba un hermoso collar de oro y coral, y alrededor de la cintura se había ceñido un cinturón de oro.</span></b>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8982601.post-1099431712152637152004-11-02T13:30:00.000-08:002013-07-26T10:03:34.400-07:001-Genesis.<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3ypJRicaGsSfCN-tVbSGb8ZYKl4cbVGPemJquakIoIfSO33rPEUUGpkKBy69UFWjnocttDadHaGMPQ0UkPTc8zJP-UjSZH6_3btCBN_C6FMpJK4QXa996AgDH0qt_Cx2sqeUk/s1600-h/01.jpg" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><b><span style="font-size: large;"><img alt="" border="0" height="640" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5355447888921422162" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj3ypJRicaGsSfCN-tVbSGb8ZYKl4cbVGPemJquakIoIfSO33rPEUUGpkKBy69UFWjnocttDadHaGMPQ0UkPTc8zJP-UjSZH6_3btCBN_C6FMpJK4QXa996AgDH0qt_Cx2sqeUk/s640/01.jpg" width="419" /></span></b></a></div>
<b><span style="font-size: large;">No se conoce la fecha exacta en que vivió Siddharta. Existen muchas opiniones acerca de cuando nació y murió el buda. Sin embargo, la mayoría de los historiadores coinciden en que, probablemente, vivió entre los siglos IV y V a.c. Tal conclusión se basa en antiguas inscripciones que ubican el ascenso del rey Ashoka al trono alrededor del 268 a.c. Pero la disputa sobre la fecha de su fallecimiento continúa; los estudiosos no logran establecer si Ashoka vivió cien o doscientos años después de la muerte de Siddharta. Antiguos textos chinos, como el Zhou shu Yi Ji (Registro de las maravillas en el libro de Zhou) y el Chun Qiu (Anales de la primavera y el otoño), sitúan su muerte alrededor de 949 y 609 a.c., respectivamente. Sin embargo, la mayoría de los estudiosos contemporáneos creen que falleció entre los siglos cuarto y quinto antes de Cristo. Empero, todavía existen diversas opiniones sobre este tema. Lo que se sabe es que Siddharta nació como príncipe de los Shakyas (pequeña tribu que habitaba un reino al pie de los Himalayas, actual Nepal central) El nombre de su familia era Gautama, sus seguidores lo llamaron buda Gautama o Shakyamuni, que significa “sabio de los Shakyas”.</span></b>Ichinénhttp://www.blogger.com/profile/12186986668806088154noreply@blogger.com0